Rogelio celebra un gol ante el graderío de Heliópolis en medio del delirio de la afición.

HISTORIA | El Real Betis y la Cabalgata de Reyes

Los verdiblancos ganaron en las dos últimas ocasiones en que jugaron el 5 de enero y en el año 1975 Rogelio hizo ante el Hércules el único hat-trick de su carrera

Por Manolo Rodríguez

 

Cuando el Real Betis comience a jugar en Huesca el primer partido del año 2019, las calles de Sevilla estarán inundadas por la Cabalgata de Reyes del Ateneo. Una coincidencia inevitable, habida cuenta de que el duelo se disputa en tierras aragonesas y en un horario que no han decidido ninguno de los contendientes, sino la Liga de Fútbol Profesional, la asociación que, en coordinación con la RFEF, organiza el torneo liguero en las categorías profesionales.

En otro tiempo, sin embargo, las cosas no fueron así. El Real Betis siempre intentó evitar que su partido en Heliópolis colisionara con la Cabalgata. Algo no muy frecuente, ya que, curiosamente, en 5 de enero los verdiblancos han jugado poco, tanto en casa como fuera. Todo lo contrario de lo ocurrido el día de Reyes, en el que se cuentan choques de todo signo, tanto en la Liga como en la Copa. De hecho, aún sigue muy presente el recuerdo de la gran victoria por 3-5 del año pasado en el campo del eterno rival. En otro inolvidable 6 de enero.

En la época moderna sólo se contabilizan dos coincidencias entre el partido del Real Betis en Heliópolis y la salida de la Cabalgata. La más reciente, en 1986. Ese domingo 5 de enero se disputaba la jornada 19 del campeonato de Liga, la segunda de la segunda vuelta. Llegaba al Villamarín el Celta de Vigo y la Junta Directiva, entonces presidida por Gerardo Martínez Retamero, fijó el comienzo del partido para las 12 de la mañana, a fin de que no perturbara el desarrollo de la Cabalgata, que se ponían en marcha a las seis de la tarde desde el Pabellón de los Jardines de San Telmo.

Componían el cortejo 30 carrozas y Sus Majestades tenían un evidente perfil futbolístico. Al Rey Melchor lo encarnaba el empresario Manuel Barea (reconocido bético); al Rey Gaspar el vicepresidente económico del Real Betis, Francisco García de la Borbolla, y al Rey Baltasar, el presidente de la Federación Andaluza de Fútbol, Ginés López Cirera.

Por la mañana ganó el Real Betis en Heliópolis por 3-2. Una victoria sufrida después de que los gallegos se adelantaran por dos veces en el marcador. Romo, Hadzibegic y Valdo hicieron los tantos verdiblancos. El mejor sobre el terreno de juego fue el bosnio Faruk Hadzibegic (que deslumbraba en su primera temporada en el club) y el tercer gol llegó en el minuto 87 tras una extraordinaria jugada de Gabriel Calderón, quien regateó a varios contrarios y llegó hasta la línea de fondo para dar el pase de la muerte.

Con arbitraje del colegiado madrileño Jiménez Muñoz de Morales, los equipos salieron con las siguientes alineaciones:

Real Betis: Cervantes; Diego, Alex, Hadzibegic, Calleja; Ortega, Parra, Romo; Ito (Valdo, m.80), Gabino y Calderón.

RC Celta: Pereira; Lemos, Maraver, Javi, Mercader; Atilano, Lema, Arteaga, Marián (Cortés, m.75); Baltazar (Contreras, m.49) y Lucas.

Al Betis en aquellos entonces lo entrenaba Luis Carriega, en su segunda etapa, y al Celta lo dirigía José Luis García Traid, un viejo conocido de la afición bética, que en 1979 había ocupado durante seis meses el banquillo del Villamarín.

Más ajustados fueron los horarios en el caso inmediatamente anterior. Exactamente, el domingo 5 de enero de 1975, cuando faltaban dos jornadas para que se cerrara la primera vuelta de una temporada de agradable recuerdo para la afición verdiblanca. Esa campaña en la que el Real Betis era el único club de la ciudad que militaba en la Primera División del fútbol español.

El equipo que entonces entrenaba Ferenc Szusza iba séptimo en la clasificación, pero con los mismos puntos que el cuarto. Ya había derrotado al Barcelona en Heliópolis e incluso se había permitido la machada de ganarle al Athletic de Bilbao en San Mamés, con gol de Cardeñosa. La gente estaba contenta.

En vísperas de Reyes llegó al Villamarín el Hércules de Alicante. Habida cuenta de que la Cabalgata de Reyes salía a las seis de la tarde del Parque de María Luisa, la Junta Directiva del presidente Pepe Núñez fijó el inicio del partido para las cuatro menos cuarto de la tarde. Así no se perjudicaba a nadie.

Ese año salieron en la Cabalgata 31 carrozas y los Reyes Magos fueron encarnados por el ganadero Gabriel Rojas (Melchor), el empresario hotelero Manuel Otero Luna (Gaspar) y el también empresario Francisco de Sales Núñez Naranjo (Baltasar), hermano del presidente del Real Betis.

La tarde del sábado día 4 llegaron los Reyes anticipadamente a la concentración verdiblanca en el hotel María Luisa Park. Hasta allí acudieron las esposas e hijos de los futbolistas, directivos y empleados del club a quienes Sus Majestades les entregaron juguetes y regalos. No faltó nadie. Excelente ambiente hasta que a las nueve de la noche Ferenc Szusza dio por concluido el acto.

Al día siguiente, el campo se llenó en el partido contra el Hércules. Salió una tarde soleada y espléndida y el Betis les facilitó una entrada gratis a todos los menores de 12 años. Una chiquillería que se hizo notar y entre la que se le repartieron caramelos antes y en el descanso del encuentro.

Después, sobre la hierba, el protagonismo lo acaparó por completo Rogelio Sosa, el gran Rogelio, que firmó el único hat-trick de su trayectoria futbolística. Tres goles para llevarse el balón a casa y sentenciar el rotundo 3-0 que campeó en el marcador al final del choque. El primero y el último al batir desde el punto de penalti al portero paraguayo Humberto y el segundo al cabecear un centro al área que previamente había tocado Alabanda.

Esa temporada 1974-75 fue la mejor de Rogelio a lo largo de su carrera. Jugó más que nunca (30 partidos de Liga y 4 de Copa) e hizo más goles que en ninguna otra en Primera División, 8 en total. Un magnífico registro para este mito que había debutado en 1962 y que ya contaba 31 años de edad. El capitán indiscutible de aquella escuadra que estaba alumbrando el gran éxito del 77.

Aquel partido contra el Hércules lo arbitró el colegiado vizcaíno Sáinz Elizondo y las alineaciones fueron las siguientes:

Real Betis: Esnaola; Bizcocho, Biosca, Sabaté, Cobo; López, Alabanda, Cardeñosa; Benítez (Del Pozo, m.70), Rogelio (Blanco, m.82) y Anzarda.

Hércules: Humberto; Juan Antonio, Giuliano, Rivera, Quique; Andréu (Pachón, m.26), Baena, Juan Carlos; Pepín, Arieta y Carcelén (Illán, m.66).

Como queda visto, los dos casos más recientes de partidos del Real Betis en 5 de enero se saldaron con sendas victorias y sin perjudicar a la Cabalgata. En Huesca, la coincidencia horaria con el Cortejo será inevitable, pero confiemos en que el resultado mantenga la tradición.