Finidi disputa un balón con dos zagueros de la Real Sociedad en el partido de Anoeta correspondiente a la eliminatoria de Copa de 1998.

HISTORIA | Cuatro eliminatorias a uno

El Real Betis supera claramente a la Real Sociedad en el balance de los enfrentamientos coperos desde que en 1931 se vieran las caras por primera vez en el Patronato y en Atocha

Por Manolo Rodríguez


Al Real Betis se le ha dado bien la Real Sociedad en la Copa. Cinco eliminatorias disputadas y cuatro clasificaciones verdiblancas. Todas ellas en duelos a ida y vuelta y en momentos históricos diferentes. Ahora llega un nuevo asalto en Heliópolis y esta vez es a partido único. Todo o nada en un solo encuentro. Otro momento singular del que se hablará en el futuro, como ahora recordamos todos los precedentes coperos que nos ha dejado la historia desde la lejana década de los años 30 del pasado siglo.

La sorpresa de 1931

La primera vez que el Real Betis y la Real Sociedad se enfrentaron en la Copa de España fue en el año 1931. En el torneo que entonces llevaba el nombre del Rey Alfonso XIII. Una eliminatoria llena de simbolismo de la que ya nos ocupamos en su momento y que figura en la colección de relatos del primer volumen del libro "Historias del Betis". 

Recordemos que el partido de ida se disputó en el campo del Patronato el 12 de abril de 1931 y que ese mismo domingo se celebraron unas elecciones municipales que acabaron provocando la caída de la Monarquía y la proclamación de la II República.

Aquel partido lo ganaron los verdiblancos (entonces en Segunda) por 5-1, resultado que fue todo un acontecimiento en el fútbol español, ya que los donostiarras venían de ser terceros en la Liga de Primera con los mismos puntos que el campeón (Athletic de Bilbao) y que el subcampeón (Racing de Santander), en un apasionante duelo resuelto al final por un triple empate. 

El 3 de mayo de 1931 se disputó el partido de vuelta de aquellos dieciseisavos de Copa. Una Copa que, a esas alturas, ya no se llamaba del Rey Alfonso XIII, sino que pasó a ser denominada como Copa del Presidente de la República. Un choque, además, que enfrentó a dos escuadras que ya no se llamaban como en la ida. El Real Betis había pasado a ser el Betis Balompié a secas y la Real Sociedad era ahora la Sociedad de Fútbol de San Sebastián, que a partir de junio sería conocida como el Donostia FC.

A pesar de caer derrotado por 4-1 en Atocha el Betis se clasificó y más tarde fue pasando eliminatorias hasta llegar a la mismísima final contra el Athletic de Bilbao. Un gran éxito que ser convirtió en el preludio del ascenso a Primera División que llegaría un año después.

Eliminación en 1965

El segundo cruce copero entre béticos y realistas llegó en 1965. También en los dieciseisavos de final. Los verdiblancos venían de salvarse unos días antes en el Nou Camp de Barcelona y recibieron a los guipuzcoanos en Heliópolis un martes de Feria. 

Buena entrada en partido nocturno. Antes de dar comienzo el partido le fue entregado al delantero centro bético Fernando Ansola el trofeo que lo acreditaba como el máximo goleador de la temporada anterior. Amenizó el acto la Banda de Infantería de Marina de la base de Rota, mientras que desfilaba por el estadio un grupo de quince muchachas americanas con sombrero de ala ancha, las cuales eran portadoras de quince globos verdes y blancos, tantos como los goles obtenidos por el delantero bético, a los cuales se les dio suelta en espectacular cierre del emotivo acto.

Fernando Ansola, por cierto, que una vez retirado del fútbol en San Sebastián (su último equipo fue la Real), colgaba del balcón de su casa, frente a Atocha, una bandera del Betis en cada ocasión que los verdiblancos comparecían en el feudo blanquiazul.

El encuentro lo ganó la Real Sociedad por 1-2, con tantos de Urreisti y Amas. El gol bético lo hizo Rogelio. En la vuelta también se impusieron los donostiarras por 2-0, repitiendo precisamente los mismos goleadores del primer partido. Un desenlace inesperado, por cuanto la Real Sociedad militaba en aquel tiempo en Segunda División, lo cual no fue óbice para que completara un excelente torneo copero que la llevó hasta las semifinales. En el Betis se pensó que bastante habían hecho con mantener la categoría tras una campaña llena de sobresaltos en la que por el banquillo del Villamarín pasaron hasta cuatro entrenadores.

La primera visita a Anoeta en 1995

Después, hubieron de pasar tres décadas hasta que verdiblancos y blanquiazules volvieran a verse en el torneo del KO. Fue el jueves 26 de enero de 1995, justo cuando aquel gran Betis de Lorenzo Serra estaba en su cota más alta tras el ascenso del año anterior. Cuatro días antes había ganado en el campo del eterno rival con un penalti transformado por Alexis y la afición vivía en éxtasis. Sumaba 6 partidos seguidos sin perder y era 5º en la clasificación liguera.

Con ese viento de cola jugó el Real Betis por primera vez en su historia en el nuevo campo realista de Anoeta. Los locales le entregaron una placa conmemorativa y en las previas del choque se guardó un emotivo minuto de silencio en memoria de Gregorio Ordóñez, teniente de alcalde del Partido Popular asesinado por ETA cuarenta y ocho horas antes.

En la Real fue baja Imanol Alguacil, entonces lateral derecho y hoy entrenador del club Txuri-urdin y aunque Serra hizo rotaciones, nada detenía a aquel Betis poderoso. Fue mejor en el conjunto del partido, dispuso de las ocasiones más claras y acabó imponiéndose con un cabezazo de Juan Ureña en el minuto 46 de partido.

De vuelta de San Sebastián el Betis recibió en el Villamarín al Real Madrid, que venía como líder, y le aguantó el tirón con un meritorio empate a cero. Eso fue un domingo y el jueves siguiente, 2 de febrero, se disputó el partido de vuelta de la eliminatoria copera. Hizo frío y el estadio no registró una buena entrada. Ganó el Betis por 3-1 y quienes desafiaron los rigores de la temperatura pudieron disfrutar aquella noche del mejor gol del polaco Kowalczyk con la camiseta verdiblanca. Sabas y Cuéllar hicieron los otros dos tantos béticos.

Uniforme de estreno en 1998

En 1998 el bombo copero quiso que de nuevo volvieran a encontrarse ambos rivales en el torneo del KO. Los donostiarras marchaban terceros en aquella Liga 1997/98 y los verdiblancos debutaban en la competición en la que habían sido subcampeones el año anterior. Un buen cartel para los octavos de final. 

Al Real Betis lo dirigía Luis Aragonés y los verdiblancos acudieron al choque de ida San Sebastián sin haber podido competir el domingo anterior, ya que fue aplazado su partido contra el Valladolid por el fallecimiento del presidente pucelano, Marcos Fernández.

Este primer encuentro se disputa el miércoles 14 de enero de 1998 en Anoeta y el Real Betis salta a la hierba con un estreno que merece el aplauso general. Luce una hermosa equipación verde con medias a rayas horizontales. 

El nuevo uniforme nace bendecido por el éxito. El Betis juega un excelente partido y se impone por 0-2. Marcan Finidi e Iván Pérez e incluso pudo ampliar la ventaja Alexis con el lanzamiento de un penalti que se fue fuera.

Esa noche debutó en la Copa del Rey el guardameta Antonio Prats (que el año anterior siempre había sido suplente de Pedro Jaro en este torneo) y Luis Aragonés acogió la victoria con evidente satisfacción. 

La vuelta en casa se jugó el miércoles 21 de enero y pareció un trámite desde el inicio. El Betis se esmeró en conservar la renta y la Real Sociedad no fue capaz en ningún momento de transmitir la idea de que podía culminar la remontada. El partido concluyó con empate a uno, goles de Oli y Aldeondo. 

El último éxito de 2019

Dos décadas largas más tarde volvió la Real Sociedad al Villamarín para disputar una eliminatoria de Copa. Un asunto muy reciente. Corría el 10 de enero de 2019 cuando se disputó el choque de ida en terreno bético. Octavos de final. Mucho público en las tribunas, mayor dominio bético y partido cerrado que concluyó con empate a cero. 

La vuelta en Anoeta una semana más tarde fue otra cosa. Un duelo pasional jugado a tumba abierta por blanquiazules y verdiblancos. Abrió el marcador Sergio Canales pasada la media hora y empató enseguida la Real con gol de Zubeldia. 

Tras el descanso, el claro dominio local lo puso en ventaja con un testarazo de Mikel Merino. Entonces reaccionó el Betis y Loren empató a dos a veinte minutos del final. El valor doble de los goles marcados en campo contrario clasificó al Real Betis, que entonces dirigía Quique Setién.

Del once inicial de aquella noche en Donostía, hasta 8 jugadores permanecen en la disciplina verdiblanca. Un paisaje muy similar que invita a los mejores sueños. Los que siempre trae la Copa, sean cuales sean sus modos y sus formatos.

El deseo permanente de que el futuro pueda ser aún mejor que lo que hemos dejado atrás.