Ya tocaba. El buen juego y el trabajo al final se pudieron traducir en una victoria. Merecida. Apoteósica. De infarto. Y ante un señor equipo como Herbalife Gran Canaria (82-81).

Y eso que el encuentro arrancó torcido para los intereses verdiblancos. El conjunto insular anotaba fácil desde el perímetro con cuatro triples desde la esquina para poner una preocupante desventaja de -12 (6-18). Pero este equipo cree, compite y nunca baja los brazos. Fue comiendo terreno a su rival hasta igualar las fuerzas en el segundo cuarto. Defensa y buen trabajo en ataque de prácticamente todos los hombres del plantel. Un triple de Slaughter ponía el empate en el electrónico (35-35) y, acto seguido, otra canasta de Petit Niang -otro gran partido el suyo- daba la primera ventaja bética antes del partido (37-35). Pese a todo, los de Katsikaris se fueron por delante al descanso (37-41).

No arrancó nada bien el tercer cuarto. Demonte Harper cogió el mando del choque y, con ocho puntos consecutivos en apenas dos minutos, elevó la renta de su equipo hasta los +10 (39-49). Sin embargo, de nuevo el equipo se rehízo para devolver la igualdad al choque con un triple de Nacho Martín desde la esquina (54-54). Todo se resolvería de nuevo en el último cuarto.

Y el equipo dio la talla de verdad. Esta vez el balón no quemó. Y el equipo jugó con muchísima personalidad. Pese a conceder algunas segundas opciones al rival con el rebote y que Jerome Jordan -prometedor su debut- se puso con cuatro personales a 8:43 para el final, defendió duro e intenso. Y atacó bien. Gastando posesiones y con buena selección de tiro. También apareció una muy buena versión de Slaughter.

Precisamente un 2+1 del internacional polaco ponía de nuevo a los verdiblancos por delante (61-60 a 7:58 para el término del choque). Y, como no, Albert Oliver tiró de galones y clase para sumar. De nuevo Slaughter ampliaba la renta a +6 a 3:19 (72-66). Aunque este Herbalife Gran Canaria iba a vender cara su derrota. Cook, con dos triples, dio vida a los suyos y Costello, con otro lanzamiento exterior, ponía de nuevo las tablas a 1:07 (75-75). Tocaba sufrir.

Slaughter culminó con canasta la posesión del conjunto bético (77-75). En la siguiente acción, Costello sólo anotaba uno de sus dos tiros libres tras una discutida falta de Tobias Borg que suponía su eliminación (77-76) y Niang cazaba un rebote salvador tras triple errado por Cook. El interior bético, además, recibía falta y se lesionaba en la acción

Ahí llegó el turno de Albert Oliver, que no falló con los tiros libres cuando más lo necesitaba su equipo en un tramo final de infarto de intercambio de canastas. Sipahi pudo cerrar el partido en los últimos segundos, pero únicamente anotó uno de sus lanzamientos (82-80). Quedaban seis segundos para el final y Herbalife Gran Canaria se encontró con una falta a falta de ocho décimas. Harper tuvo la opción de mandar el partido a la prórroga, aunque erró su segundo lanzamiento. No habría sido justo. Al final victoria sufrida, agónica y merecida para recuperar la esperanza en un equipo que nunca baja los brazos. 

Coosur Real Betis: Sipahi (13), Borg (-), Conger (4), Whittington (2), Niang (15) -cinco inicial-, Oliver (12), Slaughter (14), Almazán (7), Martín (3), Enechionyia (3) y Jordan (9).

Herbalife Gran Canaria: Cook (8), Rabaseda (6), Harper (22), Shurna (9), Costello (9) -cinco inicial-, Radicevic (-), Okoye (6), Beirán (8), Burjanadze (7) y Bourousis (6).

Árbitros: Pérez Pizarro, Sergio Manuel y Sánchez Cutillas. Tobias Borg y Matt Costello fueron eliminados por faltas personales.

Parciales: 16-24, 21-17, 17-15 y 28-25.

Incidencias: Partido correspondiente a la 16ª jornada de la Liga Endesa disputado en el Palacio de los Deportes de San Pablo ante 5.711 espectadores.