Los jugadores béticos celebran uno de los goles en el triunfo ante el Manzanares.

Toca salir del bache

Tres derrotas en las últimas tres jornadas empañan el inicio del pasado mes, donde conseguimos los dos primeros triunfos del curso.

Comenzamos el repaso a estas últimas cinco jornadas con lo que supuso el primer triunfo de la temporada, un 5-2 ante el Santa Coloma que comenzó a un ritmo muy alto, 2-1 al tercer minuto. El partido siguió muy intenso, y en el 19' pusimos tierra de por medio con el 3-1. Ya en la segunda mitad, el conjunto colomense quiso meterse en el partido, pero emergió la gran figura de Molina. En los mejores momentos del conjunto rival, un gol de Piqueras parecía sentenciar el encuentro, pero solo dos minutos más tarde Povill recortaba distancias y metía de nuevo en el partido a Industrias a 6 para el final, quienes se volcaron infructuosamente, puesto que en los últimos llegó definitivo 5-2 de Piqueras.

Una jornada más tarde celebramos el segundo triunfo del curso ante un gran Quesos Hidalgo Manzanares. El partido comenzó con un gol de pizarra de Raúl Jiménez. En el minuto 8, un contragolpe bético culminado por Lemine a pase de Raúl Jiménez puso más distancia en el marcador, pero los locales, tras golazo de Javi Alonso, se metían de lleno en el encuentro en el minuto 13. Segunda mitad de intercambio de golpes hasta que, en el tramo final, los locales reaccionaron dándole la vuelta al encuentro en apenas cinco minutos a pesar de las grandes intervenciones de Molina. Sin embargo, no bajamos los brazos y el gol de Carrasco ponía de nuevo las tablas apenas un minuto después del 3-2. Los nuestros se lanzaron por la victoria y la acabaron consiguiendo gracias a un gol de Roger Serrano, que supuso el 3-4 final. En los instantes finales, Molina se puso la capa de héroe salvando al equipo con varias intervenciones.

En Peñíscola volvió a salir cruz. El partido arrancaba con un Betis dominador e intenso en campo rival, pero con un 2-0 adverso a los 11 minutos, que quedó neutralizado antes del descanso con los goles de Raúl Jiménez y Piqueras.

El conjunto verdiblanco empezó a creer en la remontada y hasta en tres ocasiones tuvo que intervenir el portero local para salvar a los suyos, pero una gran jugada personal de Pani volvería a poner por delante a Peñíscola. Un gol que levantó de nuevo el ánimo local y que sirvió para que en una jugada desafortunada en defensa colocara el definitivo 4-2 tras marcar en propia puerta de Pablo Otero. Una semana después, cosechamos otra derrota ante el potente Inter Movistar, en un partido que arrancó con ritmo frenético, con un buen gol de Lemine después de que Molina detuviese un penalti a los visitantes, quienes reaccionaron poniendo el empate mediante Drahovsky y el 1-2 tras gol de Raya a falta de dos minutos para el descanso.

En la segunda parte, el ritmo aumentó y el conjunto rival puso tierra de por medio tras el gol de Raúl Gómez. Buscamos constantemente el segundo, pero una gran actuación del portero interista y la ayuda de la madera lo imposibilitaron. Ya en el tramo final, después de varios intentos con portero jugador, Raya hacía el definitivo 1-4 con la portería vacía en el último minuto. El resultado fue demasiado cruel para lo vivido en pista, como igual ocurrió hace unos días en la visita a Cartagena, donde caímos por un 4-0 algo engañoso, tercera derrota consecutiva, tras una primera parte que cerramos con dos goles de desventaja tras no haber sido tan inferiores en el juego y haber estado particularmente bien en defensa. Ya en la segunda parte, salimos a por todas, pero los palos y un gran Chemi evitaron que llegara el ansiado y merecido tanto verdiblanco, que recibió el tercero ya volcado con portero-jugador. Propusimos, controlamos el balón, pero el muro defensivo cartagenero imposibilitó creer en la lucha por los puntos.