Juanjo Cañas, el único jugador que estuvo en las cuatro victorias béticas en Anoeta, disputa un balón en el choque copero de 1998.

HISTORIA | Las cuatro victorias del Real Betis en Anoeta

Dos triunfos en Liga y dos en Copa, en los años 1995, 1997, 1998 y 2003, que tuvieron el vínculo común de Juan José Cañas, único jugador verdiblanco que participó en todos esos encuentros

Por Manolo Rodríguez

 

El Real Betis ha ganado en cuatro ocasiones en el estadio de Anoeta de San Sebastián, recinto inaugurado en 1993 que vino a reemplazar al viejo campo de Atocha, aquel templo futbolístico que tenía al público encima de los jugadores y en el que se respiraba toda la épica del deporte que inventaron los ingleses en el último tercio del siglo XIX.

La primera de esas victorias, como ya quedó dicho, tuvo lugar la noche en que debutó en dicho escenario. En una eliminatoria de Copa disputada en el año 1995. Ganó el Betis por 0-1, con gol de Ureña. Ese encuentro lo dirigió el colegiado extremeño Pajares Paz y las alineaciones fueron las siguientes:

Real Sociedad: Alberto; Fuentes, Loren, Picabea, Aranzábal; Lumbreras, Imaz (Iturrino, m.47), Karpin y De Pedro; Luis Pérez (Idiakez, m.62) y Kodro.   

Real Betis: Diezma: Merino, Ureña, Vidakovic, Josete; Cañas, Roberto Ríos, Alexis, Menéndez; Sabas (Olías, m.70) y Kowalczyk.

En la temporada 1996-97 llegó el primer triunfo en la Liga. En la jornada 33. Abril del 97. Seguía como entrenador Lorenzo Serra y se impusieron los verdiblancos por 0-1 con gol de Josete y una alineación que se parecía mucho a la de dos años atrás.

En 1998 el bombo copero quiso que de nuevo volvieran a encontrarse ambos rivales en el torneo del KO. El último precedente hasta el duelo que en la actualidad mantienen béticos y realistas y que se presentó entonces como un firme pulso entre dos equipos que tenían poderosos argumentos. Los donostiarras marchaban terceros en aquella Liga 1997-98 y los verdiblancos debutaban en la competición en la que habían sido subcampeones el año anterior. Un buen cartel para los octavos de final.

Al Real Betis lo dirigía Luis Aragonés y su marcha liguera había tenido algunos altibajos. Seguía vivo en la Recopa de Europa y cuando llegó el enfrentamiento copero estaba en la mitad de la tabla liguera, aunque con el regusto agradable de haber sido capaz de ganarle al Real Madrid por 3-2 en el último partido jugado en el Villamarín. Aquel había sido el primer choque del año 1998 y se esperaba que tuviera continuación a la jornada siguiente con la visita del Valladolid a Heliópolis. Pero no pudo ser. Cuarenta y ocho horas antes falleció el presidente del Valladolid, Marcos Fernández, y la entidad pucelana solicitó el aplazamiento del encuentro.

Así pues, el Betis acudió a San Sebastián sin haber competido el domingo anterior. Algo de lo que se quejaba amargamente Luis Aragonés. Y así lo expresó en sus declaraciones. Dijo: "Ha sido muy perjudicial y nos ha venido bastante mal, porque nos resta ritmo de competición. La Real estará más en forma".

El miércoles 14 de enero de 1998 se disputa el encuentro de ida en Anoeta. Y el Real Betis salta a la hierba con un estreno que merece el aplauso general. Luce una hermosa equipación verde con medias a rayas horizontales.

Según dejó escrito en 'Memoria del Betis 2', Juan Salas Rubio, uno de los mayores especialistas en el estudio de la evolución histórica del marketing deportivo en el club heliopolitano, se trataba de una camiseta "con cuello de solapa en tonos blancos y negros, mangas verdes con una banda blanca donde lucía el logo de la marca Kappa y una doble línea curva que arrancaba en la base del pico del cuello y se abría por los costados con la publicidad de Ocaroil sobre una ancha franja, también blanca, que cruzaba el pecho de manera longitudinal, y con los dorsales y los nombres en negro colocados por sublimación".

El nuevo uniforme nace bendecido por el éxito. El Betis juega un excelente partido y le da un repaso en toda regla a los donostiarras. Sus niveles de posesión son altísimos y asesta el primer golpe a los 32 minutos. Finidi arranca con el balón controlado y antes de pisar el área suelta un trallazo que sorprende al portero Alberto.

Nada más comenzar la segunda parte tienen los verdiblancos la oportunidad de dejar prácticamente sentenciado el duelo. Alfonso es objeto de un claro penalti, pero a Alexis se le va fuera el lanzamiento. Aun así, el Betis sigue mandando y en el minuto 91 llega el 0-2 definitivo marcado por Iván Pérez.

Arbitró el colegiado extremeño Carmona Méndez y los equipos salieron con las siguientes formaciones:

Real Sociedad: Alberto; Fuentes, Loren, Picabea, Rekarte; Juan Gómez (Gracia, m.56), Imaz, Kühbauer; Cvitanovic (Kovacevic, m.61), Mutiu (Craioveanu, m.46) y De Paula.

Real Betis: Prats: Ureña, Solozábal, Olías; Jaime, Alexis, Cañas, Jarni (Iván Pérez, m.82); Finidi (Márquez, m.74), Alfonso; y Oli (Fernando, m.68).

Esa noche debutó en la Copa del Rey el guardameta Antonio Prats (que el año anterior siempre había sido suplente de Pedro Jaro en este torneo) y Luis Aragonés acogió la victoria con evidente satisfacción. Destacó el gran partido de su equipo y llegó a afirmar que el resultado le había parecido corto para los méritos verdiblancos. Su última frase fue muy rotunda: "Cuando tiene un buen día, el Betis se comporta como un gran equipo".

La vuelta en casa se jugó el miércoles 21 de enero y pareció un trámite desde el inicio. El Betis se esmeró en conservar la renta y la Real Sociedad no fue capaz en ningún momento de transmitir la idea de que podía culminar la remontada. El partido concluyó con empate a uno. Oli abrió el marcador en el minuto 22 y Aldeondo lo cerró en el 80. Esa noche la noticia nacional, y quizá mundial, fue que el Deportivo Alavés eliminó al Real Madrid en el Bernabéu.

Los verdiblancos siguieron adelante en la Copa y en cuartos de final le correspondió enfrentarse con el Real Zaragoza. Y ahí llegó, sin ninguna duda, una de las grandes decepciones de la temporada. Un jarro de agua fría en toda regla.

Respecto a la vistosa equipación estrenada en Anoeta, el Real Betis sólo volvió a lucirla dos veces más en lo que restaba de campaña. En el mes de febrero en Compostela (triunfo por 2-3) y de nuevo en San Sebastián en marzo, aunque en esta ocasión con derrota por 2-0. Después ya no hubo más.

La cuarta victoria, por el momento, del Real Betis en Anoeta llegó en el ejercicio 2003-04 y se produjo de nuevo en el campeonato de Liga.  Fue el 6 de diciembre de 2003 y los verdiblancos se impusieron por 0-4 con dos goles de Joaquín (que estuvo extraordinario), Capi y Juanito. Un resultado muy necesario, según iban las cosas en aquel momento, que le dio aire al proyecto del entrenador Víctor Fernández, que cumplía su segunda temporada. Desde entonces, hasta hoy, cinco empates y cinco derrotas. Confiemos en que vuelvan las victorias.

Y un último dato: sólo un jugador del Real Betis intervino en los cuatro partidos que los verdiblancos ganaron en Anoeta en 1995, 1997, 1998 y 2003. Hablamos del incombustible centrocampista Juan José Cañas, que fue titular en los dos choques coperos y disputó 38 minutos en el encuentro de Liga jugado en 1997 y 9 en el de 2003. Un recuerdo histórico que dice mucho y bien de su destacada carrera en el club de Heliópolis. Otro simbólico homenaje a las 15 temporadas que defendió la camiseta verdiblanca.