Los regalos se pagan y más en Valencia. Esa fue la conclusión que se llevó de vuelta el Coosur Real Betis tras un encuentro en el que compitió y tuvo opciones hasta el final.

La puesta en escena fue inmejorable para los verdiblancos. Kay desatado, Randle corriendo y el equipo funcionando en defensa.

Los valencianos no anotaban y la velocidad en las piernas del Coosur Real Betis servía para sacar las primeras ventajas al final de un primer cuarto casi perfecto (12-22).

En el segundo cuarto tocaba la reacción local y el guion de los de Ponsarnau se cumplió. Los triples empezaban a aparecer con Prepelic y Van Rossom. Dubljevic se hacía fuerte por dentro y Plaza y los suyos no lograban pararlo.

Feldeine no anotaba, los bases no encontraban espacios y poco a poco los de casa iban estrechando la ventaja en el marcador.

Ouattara aparecía en escena con la ayuda de un voluntarioso Magassa, pero los puntos desde la esquina eran contestados por Valencia, quien además encontró la estaca final sobre la bocina con un triple de Marinkovic que ponía el 38-37 en el marcador.

Tras el paso por vestuarios, la tónica del primer cuarto parecía que se aplicaba sobre la pista. Energía, fuerza, defensa y velocidad. Ouattara ponía los puntos y el equipo el trabajo para sacar las primeras ventajas tras la reanudación.

Pero Valencia no quería que se repitiera la historia. Marinkovic y Prepelic desde la línea de tres y Dubljevic, que visitó en numerosas ocasiones la línea de personal, hacían que se llegara al final del tercer cuarto con una ventaja aún mayor para los locales (68-59).

En el último cuarto fue un querer y no poder. Las pérdidas y los errores en canastas fáciles llegaban con la facilidad con la que no llegaba el acierto. El aro se hacía pequeño y los robos eran castigados.

Sin embargo, el Coosur Real Betis no quería irse sin decir la última palabra. Plaza movía al equipo y un arrebato de orgullo de Kay y Feldeine parecían meter de nuevo en partido a los béticos tras un triple del capitán Almazán (85-81).

Al final, el esfuerzo no tuvo premio y la victoria se quedó en La Fonteta tras un gran trabajo de los hispalenses, a los que les faltó creer en momentos puntuales.