Sin duda alguna, la principal importancia del gol de Rubén Castro en el día de ayer se refleja en el casillero verdiblanco ya que el tanto hizo que el Real Betis sumara 20 puntos en el campeonato y superara al Real Zaragoza que no ha podido vencer esta mañana al Sporting de Gijón, colocándose el Betis quinto. Si el Recreativo de Huelva consigue una victoria o un empate en el enfrentamiento de esta tarde contra la Ponferradina, esa puntuación le valdría al conjunto heliopolitano para acabar entre los cinco mejores de la clasificación a sólo cinco puntos del primer puesto, compartido por Las Palmas y Valladolid con 25.

En todo caso, el cuadro bético acabará la jornada en puestos de play-off. Ésa es la verdadera relevancia del tanto de ayer, pero también atesora otras magnitudes que le dan mayor calado y que hacen que el gol conseguido en el minuto 50 no pase inadvertido entre la ristra de anotaciones que lleva el canario.

92 goles. Se dice pronto, y cuesta lo suyo realizarlos. Que se lo digan a un emblema del beticismo como Rogelio Sosa que ayer pudo ver como el ‘24’ verdiblanco lo alcanzaba en el historial de goleadores. Ésa fue la connotación histórica de un gol que también esconde otra ambición personal del delantero. Son diez ya los gritos que Rubén Castro ha sacado a la afición verdiblanca. Su pugna con Araujo (Las Palmas) y Borja (Real Zaragoza) por el pichichi ha tenido esta jornada un punto de inflexión. Los tres atacantes partían con nueve dianas en la etapa 12 pero sólo Rubén ha conseguido acertar entre los tres palos y se destaca como líder en solitario de esta clasificación.

Aún quedan algunos partidos por jugarse. Koné (Racing) y Scepovic (Real Mallorca) tendrían que anotar cinco goles hoy para igualar al verdiblanco. Tamudo (Sabadell), seis. Y así una larga lista de improbables que no impedirán que Rubén Castro acabe la jornada como pichichi de la categoría.